Entre las primeras tareas para poner en marcha un emprendimiento, es necesario considerar la gestión de cuentas bancarias y otros servicios financieros. Si bien la bancarización en América Latina está apenas por encima del 50% de la población (según datos del Banco Mundial y la Organización Mundial de Comercio), y con un crecimiento de 10 puntos porcentuales en los últimos 5 años, es prácticamente imposible crear una empresa que no opere con una entidad financiera. La tendencia es definitiva.
Para todo lo relacionado con los ingresos es fundamental tener al menos una cuenta para recibir depósitos o transferencias, y para asociar a ella diversos medios de pago que se le puedan habilitar a los clientes (tarjetas de crédito, débito o débitos automáticos en cuenta); lo mismo aplica para administrar pagos a proveedores, sueldos, impuestos y servicios, sea mediante transferencias electrónicas o cheques, e incluso para contar con una tarjeta de crédito corporativa para hacer algunas compras o abonar algunos gastos operativos. Los gobiernos también requieren que las empresas estén bancarizadas para automatizar el cobro de impuestos. Otros aspectos que impulsan esto son la seguridad y la capitalización financiera de ahorros.
Para Cobrar | Para Pagar
Para abrir la cuenta de una compañía nueva suele ser necesario presentar algunos avales personales de los titulares y referencias, ya que no hay balances ni declaraciones impositivas que puedan exhibir el respaldo o el volumen de la operación. En años subsiguientes sí se podrán utilizar estos instrumentos para abrir nuevas cuentas o gestionar ampliaciones en las líneas de crédito disponibles.
Si bien en algunos rubros aún se utiliza efectivo, la creciente transformación digital de los negocios hace que en la mayoría de los casos todo se maneje por medios electrónicos.Las entidades financieras suelen tener productos especiales para Emprendedores y para las Pequeñas y Medianas Empresas; es importante analizar bien estas ofertas y conocer las cláusulas que regirán los servicios contratados, los costos de cada producto, las comisiones y los intereses que puedan aplicar en cada caso, para tener claridad sobre el costo financiero total que deberá agregarse al flujo de fondos de la compañía.
Medios de Pago
Los clientes necesitan tener opciones para elegir la que deseen utilizar en cada transacción. Para operar con tarjetas de crédito hay básicamente dos modelos: una es haciendo convenios con cada marca (Visa, Mastercard, Amex, etc.), en forma directa o a través de la entidad bancaria con la que se decida operar, y la otra es contratando el servicio de un ‘gateway’, que con un solo contrato brinda acceso a diversos medios de pago. Esta segunda opción es la que generalmente se utiliza para las ventas online. La elección tendrá que ver con los costos asociados a cada opción y también al perfil de cada empresa, es decir, si procesa pocos tickets de alto valor, o si en cambio tiene muchas ventas de bajo importe. De ese análisis se podrá concluir cuál es la mejor alternativa.